La acuarela me permite llegar al color, llegar a la transparencia y tratar desde allí plasmar lo que a mis ojos cautiva.
El agua dibuja,el pigmento da vida.
Es magia, es un instante congelado en la retina.

Día de la Madre




Mañana será el Día de la Madre.
A mi mamá nunca le gustó celebrarlo, decía que eran artimañas mercantilistas.
La extraño tanto. Cada día, cada minuto. A veces con mucha pena, cuando dejo que me innunde el sentimiento de vacío. Como cuando no tengo cómo saber algún nombre o cuento de la familia que sólo ella recordaba, o de sólo necesitar nuevamente su olor y su abrazo. Otras veces y la mayoría de las veces, la recuerdo feliz y de hecho le hablo, porque estoy convencida que está en otra dimensión pero que no se pierde detalle de esta vida.
Qué feliz habría sido disfrutando a sus nietos. Qué feliz que habría vivido en el campo.
Cómo se habría desbordado al ver a mi sobrinita. Ver a mi hermana ser madre. Eso la habría sensillamente desbordado.
Mi mamá era una mujer de mucho carácter. Fue una mujer tremendamente valiente.
Creció en carencias, y su vida la organizó desde las carencias.
Pero tenía una fortaleza que era admirable.
Se escudó firme en convicciones. Escondió sus heridas en un carácter difícil de entender.
Ha sido la mejor compañera que he conocido.
Yo creo que muchas veces en su vida se enfrentó al miedo. Y creo que lo venció todas las veces igual como lo hizo con las cosquillas. Simplemente los dominó. Tal como lo hizo, cuando decidió que quería por fin morir en brazos de una enfermedad a la que ni siquiera le permitió que se manifestara como los doctores esperaban.

Te extraño tanto mamá. Es difícil disimular el tremendo espacio que dejaste. Te extraño.
Pero mi consuelo es que cuando más se me hace difícil asumir tu ida, vienes a abrazarme en sueños. Y sé que hoy estás bien. Sé que eres feliz. No sé como, ni pretendo entenderlo. Simplemente sé que así para tí es mejor.

Este dibujo es para mí y para tí. Quería encontrarme con tu mirada. Y lo logré dibujandola. Te ví nuevamente. Ese es mi regalo en el día de las madres. Y homenajearte es mi regalo para tí en este día de las madres.
Ahora sólo me queda estrecharte en un eterno abrazo esta noche, si me permites soñar contigo.
Feliz día Mamá.

3 comentarios:

Pilar Arranz dijo...

Querida Marcela, no quiero manchar, con mis palabras, tan lindos pensamientos pero me gustaría saber decir eso también a mi madre. Deja que ellas dos hablen...

Pamela dijo...

Valió la pena llorar tanto, increíble que lograste ponerle palabras a lo que siento, tan acertadas! Gracias hermanita, te adoro. No lo pude creer cuando abrí la página y mi mami me estaba mirando!

Adela dijo...

Esos ojos miran a la vida. Esos ojos os están mirando a vosotras, sus hijas y han guiado a tu mano para que lograses captar su mirada.
Es una mujer bella por fuera, seguramente tan linda como lo fue por dentro.
La lucha no le arrebató su belleza. La lucha hizo que su interior fuera el mejor regalo que os ha dejado.
Ojalá duermas todos los días en su abrazo.
Un beso